La Dra. MarÃa Eugenia Amado Velandia, venezolana, titular de la cédula de identidad número V-11.015.067, como parte de la comunidad del Barrio Pueblo Nuevo de San Antonio del Estado Táchira (Venezuela), mientras leÃa la Edición N° 14 de El @bogado del Pueblo (medio de comunicación e información de la Fundación FUNDELSUR de Venezuela), ha dicho a NOTISAN que le preocupa la basura que queda depositada en las calles, después que pasa el camión recolector, toda vez que los animales callejeros rompen las bolsas y la basura queda a la deriva. Manifiesta que ha acudido al Departamento de Servicios de la AlcaldÃa Municipal, pero allà le dicen que saque fotos de los vecinos que sacan basura los dÃas que no hay servicio de recolección. Agrega la denunciante que el "camión del aseo" pasa dos veces por semana.
Sugiere, la profesional de la abogacÃa, que debe la AlcaldÃa Municipal de BolÃvar impartir educación a los vecinos para, que no saquen basura a la calle los dÃas que no hay servicio de recolección, y en su defecto quien saque basura se hará acreedora de las sanciones a que hubiere lugar. Finalmente expone: Quien debe hacer cumplir las normas sobre la sacada, disposición y depósito de basuras frente a sus casas, negocios o instituciones públicas o privadas es a la misma autoridad municipal, en cabeza del señor Alcalde del Municipio BolÃvar del Estado Táchira.
Por lo demás, preocupa igualmente que en esta zona de frontera del lado venezolano, no hay un relleno sanitario, sino un "botadero de basura al aire libre", lo que perjudica el medio ambiente, y es foco de proliferación de enfermedades.
En consecuencia, expone la corresponsal de NOTISAN, que la Fundación FUNDELSUR de Venezuela, con respecto a la no existencia de un relleno sanitario, debe abocarse a desarrollar un proyecto para la creación de un relleno sanitario para esta zona de frontera; obra que beneficiarÃa al colectivo, y mejorarÃa la salud, el bienestar y felicidad de la población, que en primer lugar se siente afectada por la falta de conciencia de algunos ciudadanos, y en segundo lugar, la falta de voluntad y disposición polÃtica.
